LA ESCUELA Y LA PATRIA EN ÉPOCAS DE PANDEMIA


Capítulo XIII: reflexión de la Prof. Marisa Pedrozo, actual Inspectora Jefa Regional de la Región Educativa N°19

2020-05-25 por Publicaciones


El mes de mayo como siempre nos convoca a celebrar y a reflexionar sobre el proceso histórico que marcó en el calendario el 25 como día patrio. Este nuevo 25 nos interpela y desafía, una vez más, a imitar acciones de hombres y mujeres valientes de decisiones firmes y convicciones profundas.

Este tiempo de días inéditos de pandemia mundial, también se está escribiendo la historia que se relata comenzando con un Gobierno Nacional que cuida a su gente llegando hasta la mano amiga de aquel vecino/a que se organiza con otros y otras para preparar ollas con comida y asistir a quienes más lo necesitan.

Y, más acá o más allá, una y otra vez está la Escuela haciendo Patria. Con un compromiso profundo maestros/as, profesores, inspectores, consejeros escolares, auxiliares y directores realizando acciones que van desde subirse a un patrullero, un carro o una ambulancia para repartir cuadernillos de continuidad pedagógica para aquellos estudiantes sin conectividad y que viven en lugares alejados, como organizando campañas de vacunación en el campo, llegando a cada casa con el auto propio o consensuando dejar actividades y alimentos en una tranquera, almacén o en distintos lugares del barrio; articulando con diferentes sectores políticos, sindicales, sociales, culturales y en comités de emergencia alimentaria para cocinar o recibir donaciones de alimentos o artículos de limpieza, hasta organizando programas radiales para que los y las estudiantes reciban sus clases como también videollamadas, plataformas virtuales y muchísimas opciones y estratégias que se aprenden junto a estudiantes, docentes y familias en un escenario de aislamiento preventivo obligatorio por el covid-19.

Estos días también están cargados de reuniones virtuales necesarias para conocernos, fortalecer relaciones vinculares, afectivas y pedagógicas, afianzar canales de comunicación y establecer lazos sociales, tarea tan propia de una escuela inclusiva y democrática y de modelos de gestión que se adaptan a las nuevas configuraciones territoriales y ejercen políticas sociales solidarias para que las cosas sucedan. También, y es importante visibilizarlo, convoca a revisar prácticas naturalizadas que conviven arraigadas en conducciones propias de modelos que subyacen en paradigmas exclusores. Garantizar los principios políticos pedagógicos de inclusión, gobierno democrático y construcción de ciudadanía para una sociedad más justa, libre, equitativa y democrática es prioritario y urgente, los hechos pedagógicos contextualizados en las politicas establecidas desde el Ministerio de Educación, en la Nación y en la Provincia de Buenos Aires dan cuenta una vez más que "donde está la escuela está la Patria", reivindincando el rol docente y su compromiso con el derecho social a la educación, propiciando condiciones materiales y simbólicas que lo garanticen.

Esta desgracia de un virus tan invisible como mortal, trajo también como consecuencia favorable la solidaridad social, el valor del Estado por sobre el mercado, la reconstrucción de politicas públicas que pusieron en crisis el discurso de la meritocracia para avanzar hacia un camino de una sociedad que nos incluya a todos, todas y todes.

Lo estamos haciendo.
¡VIVA LA PATRIA!

Prof. Marisa Pedrozo, mayo de 2020.